Notas

La gente pide coaching por muchas razones, pero el común denominador es la existencia de alguna disonancia entre sus sueños y su realidad. En ocasiones esa disonancia es pequeña y el coaching puede quedar completado en una o dos sesiones; otros problemas pueden ser más complejos y requerir varias sesiones para su resolución.
Lo que para una persona no es más que un pequeño inconveniente para otra tal vez sea un gran trastorno. ¿Cuándo es un problema lo suficientemente grande para buscar ayuda? Cada persona tiene sus límites para lo que puede tolerar, y éstos dependen de sus hábitos, de su estilo de vida y de su genética. A algunas personas les basta con una pequeña perturbación para sentirse incómodas, mientras que otras son capaces de aguantar mucho antes de actuar para remediar la situación. El coach pretende que seas más consciente de vos mismo, que descubras dónde te encuentras y cómo ir más allá… El coach te ayuda a resolver problemas y a avanzar, no a regresar de nuevo adonde estabas antes.
El coach cubre el vacío existente entre lo que sos ahora y lo que deseas ser.